El deporte ofrece a las personas con discapacidad todo un abanico de posibilidades. Los motivos para estar más activo pueden ir desde querer mejorar la forma física o la alegría que produce moverse hasta la diversión que procura una actividad en equipo. O todos ellos a la vez. Cuando Ottobock comenzó a apoyar a los atletas paralímpicos hace más de 30 años, los resortes de carbono específicos para deporte supusieron una mejora sin parangón del rendimiento máximo en los Juegos Paralímpicos. A esto le siguió un recorrido conjunto con figuras destacadas del deporte para poder optimizar los productos y los servicios en todo lo relacionado con el deporte. Nuevos métodos y productos puestos a prueba para poder apoyar mejor no solo el deporte de alto rendimiento, sino también el deporte infantil y el deporte recreativo. En la actualidad, prácticamente cualquier persona que busque encontrará la oferta adecuada de deporte individual o de equipo y el equipamiento deportivo apropiado. A los principiantes les pueden ser de ayuda unos consejos, por ejemplo, a la hora de elegir y manejar prótesis o sillas de ruedas aptas para practicar deporte. Ya sea a nivel de competición o como afición, hay una cosa que hemos aprendido del deporte: a menudo, mañana se es más capaz de lo que uno cree hoy.

Practicar deporte es beneficioso para el cuerpo y para la mente. Las caras de las personas que están activas por primera vez o que lo vuelven a estar después de un tiempo lo dicen todo. Los requisitos de cada persona pueden ser muy diferentes. También los motivos son variados. Entrenar el sistema cardiovascular, preservar la libertad de movimiento personal, disminuir el estrés, llevar una vida activa y afrontar retos: todos ellos son buenos motivos para personas con o sin discapacidad para comenzar a practicar deporte. ¿Y cómo se empieza? Por medio de información y ejemplos, en las siguientes páginas queremos ofrecer ayuda a los principiantes.